martes, 16 de marzo de 2010

Sigo creyendo en sueños; que los días no tienen dueño; y que hay
verdad, y que hay amor. Cerrar los ojos es perder, frío de la noche.
No hay nombre para este dolor, cielo de mis noches. ¡Que viva
la revolución!

No hay comentarios:

Publicar un comentario